viernes, 24 de junio de 2011

Porque no se puede pelear sin una razón.

Porque no se puede pelear sin una razón.

El triste réquiem que anuncio nuestro fin.
La sangre que decía que ya no viviríamos mas.
La sonrisa del asesino... y pasos lejanos.

Fue un placer...
un honor y una satisfacción.
Servir en su ejercito hasta el final.

Mi amo y señor.
El que guió siempre nuestro corazón
Sigo confinado en su voz lejana.

Pienso en esto... todos los días.
No tengo miedo de morir.

Mi señor... es perenne.
Siempre me quedare a su lado.
Es lo que me hace feliz.

Mi vida es por servirle.
Morir por usted es mi destino...
uno que feliz acepto.

No me asusta el mundo...
Me asusta que no este en el.
Mi amo y señor.
Prometo ser su fiel ciervo.

Siempre me quedare a su lado.
Aun sigo sus pasos lejanos.
Y se que algún día volteara a mi.

Espero de verdad sea mas fuerte.
Mi vida por la suya es un trato.
Crezca y sea fuerte mi señor.
Yo confió en su gloria todavía.


Bueno pensaba en que un Samurai solo veía y obedecía a su señor, era mas que su amo, era su vida y devoción.